
Es capaz de transformar residuos plásticos como PE, PP, PS y ABS en nuevos materiales reciclados ya sea en forma de película, piezas rígidas o espuma una vez que han sido limpiados.
La elección del equipo adecuado depende del tipo de plástico, su estado y la capacidad de producción que se necesite. Según el tamaño, la forma y el volumen del material, puede utilizarse una trituradora o un granulador para reducirlo antes del proceso. La forma original del plástico influye directamente en el sistema de alimentación más conveniente para la extrusora.
Otro aspecto clave es el nivel de humedad del material. Para asegurar un proceso estable y un producto final de calidad, los plásticos deben secarse previamente, ya sea mediante un sistema de secado automático o a través de un control manual del proceso.
Esta línea de lavado ha sido diseñada para procesar y limpiar residuos plásticos de PET, un material muy utilizado en botellas para bebidas, envases para alimentos y diversos tipos de película plástica industrial. Después del lavado, las escamas resultantes pueden utilizarse en la fabricación de fibras, en la industria textil, en procesos de hilado o en la producción de nuevos materiales de embalaje.
El sistema de lavado de PET integra varias etapas clave: prelavado y clasificación del material, triturado, separación por flotación y sedimentación, lavado en caliente y en frío, retiro de etiquetas y secado final. El proceso inicia con un prelavado que elimina la suciedad superficial y una clasificación manual o automática. Luego, el material se tritura y las escamas obtenidas pasan por un lavado profundo en diferentes módulos. Para finalizar, las escamas limpias y secas se purifican mediante la eliminación de etiquetas y otras impurezas.
Está diseñada para limpiar y secar residuos de polietileno (LLDPE, LDPE, HDPE) y polipropileno (PP), ya sea en forma de piezas rígidas o de película plástica.
Su capacidad para trabajar con ambos formatos permite aprovechar una mayor variedad de residuos. El proceso inicia con una trituradora que reduce el tamaño del material, facilitando los pasos posteriores. Después, los plásticos pasan por un sistema de lavado intensivo que combina lavadoras de fricción y turbinas, seguido de un tanque de flotación y hundimiento donde se separan los plásticos pesados y otros contaminantes.
De acuerdo al tipo de material, se emplea un sistema de secado específico para eliminar la humedad. Una vez secos y completamente limpios, los plásticos pueden enviarse a una línea de granulación o utilizarse directamente como escamas listas para su reutilización.

Este equipo se encarga de separar todo tipo de impurezas de las botellas plásticas como vidrio, metal, restos de madera, papel o cartón. Al retirar estos contaminantes desde la etapa inicial, el sistema garantiza que el material llegue mucho más limpio al proceso de granulación, mejorando significativamente la calidad del reciclaje.

Esta máquina, también llamada removedora de etiquetas ha sido diseñada para retirar las etiquetas de las botellas de PET y separar ambos materiales con precisión. Su mecanismo de desprendimiento actúa directamente sobre la superficie de las botellas, logrando que las etiquetas se eliminen de forma rápida y eficaz. Para una operación más sencilla, existe la opción de trabajar sin el sistema de aire comprimido; en ese modo, botellas y etiquetas se descargan juntas a través de una única salida.